Madrid, 28 may (EFE).- Los estudios médicos a que ha sido sometido en las últimas horas descartan las que en principio se temieron graves lesiones del joven torero Francisco José Espada tras el percance sufrido en la corrida de ayer en la feria de San Isidro, que le provocó un traumatismo craneoencefálico severo.
Según el apoderado de Espada, el que también fuera matador de toros de Fuenlabrada César Jiménez, en los TAC y otros estudios radiológicos "se ha comprobado que Fran no tiene lesiones cerebrales internas, ni tampoco la fractura de mandíbula con la que se especuló al entrar en la enfermería, afortunadamente".
Francisco José Espada fue volteado aparatosamente al entrar a matar por segunda vez al toro de su confirmación de alternativa en Las Ventas, un ejemplar de El Torero que le prendió por el muslo derecho y le campaneó con violencia.
El fuerte golpe de la cabeza del torero contra la arena en su caída, así como el pezuñazo que el toro le propinó en el rostro le dejaron inerme sobre el ruedo y con la pérdida del conocimiento durante cinco minutos.
Una vez hospitalizado, Espada ha pasado la noche, "con náuseas, mareos y algunos episodios de amnesia que ya van remitiendo", informa su apoderado, a quien los médicos han informado de que el torero deberá pasar dos días más en observación por si surgieran complicaciones posteriores.
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